Odontología Slow: el método de Clínicas W que redefine la excelencia y prioriza la satisfacción del paciente

Los profesionales de la sanidad y, por ende, los del sector odontológico necesitan tiempo para conocer al paciente y para planificar correctamente. Desde el punto de vista del paciente, largas esperas y muchas visitas a la clínica pueden alejar el deseo de tener una experiencia positiva. Por ello, Clínicas W promueve desde 2017 un método propio que denominan Odontología Slow y que se basa en la calidad de los procesos, la excelencia clínica, una correcta gestión y, fundamentalmente, la satisfacción del paciente.

Odontología Slow: de la filosofía al método

El movimiento slow es un enfoque que propone una vida más pausada, reflexiva, de calidad y respetuosa con el tiempo, donde los detalles tienen la importancia. Desde esta perspectiva se origina la Odontología Slow de Clínicas W, adaptando el movimiento slow a la odontología para cambiar la experiencia de ir al dentista y promover la prevención bucodental como fuente de beneficios para la salud de las personas.

Clínicas W aplica una serie de protocolos clínicos que introducen el control en las clínicas, optimizando el tiempo y los recursos y reduciendo los costes para ofrecer un servicio personalizado, de máxima calidad y al mismo tiempo accesible. En definitiva, una odontología en calma y más humana. El Dr. Primitivo Roig es el fundador de esta red de clínicas y creador de un modelo de práctica profesional que nace tras más de una década de investigaciones.

Diferencias de la odontología slow frente a la tradicional

La odontología slow se centra en un enfoque más holístico y personalizado, priorizando la salud general del paciente y la prevención a largo plazo. A diferencia de la odontología tradicional, que a menudo se enfoca en tratamientos rápidos y soluciones inmediatas, la odontología slow toma en cuenta el bienestar emocional y físico del paciente, dedicando más tiempo a la consulta y al diagnóstico. Además, utiliza técnicas menos invasivas y materiales biocompatibles, buscando minimizar el impacto en el cuerpo. En resumen, mientras que la odontología tradicional puede ser más reactiva, la odontología slow promueve un cuidado dental más consciente y sostenible.

Ventajas y beneficios para pacientes y profesionales

La Odontología Slow es un método que beneficia tanto a los pacientes como los profesionales. El método propio de Clínicas W se centra en las personas y en potenciar su felicidad y bienestar a través de la sonrisa. ¿Cómo lo hace? Se basa en la excelencia, la prevención y la comunicación para conectar más con los pacientes y hacer de la calma la base del éxito de nuestros tratamientos.

Una odontología en calma, cercana y más humana que potencia el valor de la confianza y minimiza los errores. Los profesionales aplican una serie de protocolos de gestión que introducen orden en la clínica y un servicio que persigue constantemente la excelencia para convertir la visita al dentista en una experiencia positiva y única. Prueba de ello es el nivel de satisfacción de los pacientes, que roza la excelencia con un 96,7% tal como indica el último estudio de Salud Bucodental realizado por la propia red.

El paciente experimenta momentos de bienestar y confianza, reduciendo el estrés y la ansiedad asociados a las visitas al dentista. Además, al priorizar la prevención y el enfoque integral, los pacientes disfrutan de una mejor salud bucal a largo plazo y una menor necesidad de intervenciones invasivas. Por otra parte, los profesionales también se benefician de esta metodología, ya que trabajan con más tranquilidad y enfocándose 100% a cada paciente y tratamiento, mejorando así, sus tiempos, recursos y energía.

Principios y pilares de la Odontología Slow

Te contamos los 4 pilares fundamentales de la Odontología Slow:

Calidad por encima de cantidad: uno de los principios de la Odontología Slow es la dedicación a la calidad. Este enfoque no persigue llenar la agenda con la mayor cantidad de pacientes, sino ofrecer tratamientos personalizados y bien planificados que garanticen resultados óptimos. Al tomarse el tiempo suficiente para conocer al paciente, sus necesidades, sus miedos y su historia clínica, pueden diseñar soluciones que favorezcan su salud a largo plazo. Pero la calidad también se refleja en el uso de los mejores materiales y las técnicas más avanzadas que ofrecen resultados más duraderos y efectivos. En la Odontología Slow cada detalle cuenta, desde la precisión en los diagnósticos hasta la excelencia en la ejecución de los tratamientos.

El paciente, el centro de la odontología: en la Odontología Slow, cada paciente es único. Esta filosofía aboga por una relación más cercana y de confianza entre el dentista y el paciente, donde el diálogo es fundamental. Los tratamientos se diseñan de manera personalizada, considerando no solo las necesidades clínicas, sino también el bienestar emocional del paciente. En Clínicas W se toman el tiempo necesario para explicar cada procedimiento, responder preguntas y crear una experiencia más tranquila, y, sobre todo, de confianza. La diferencia se aprecia ya en la primera visita.

Innovación: la Odontología Slow promueve un ritmo más pausado, pero eso no significa que esté alejada de la innovación. Al contrario, uno de sus pilares clave es establecer las últimas tecnologías para mejorar la atención del paciente y los resultados de los tratamientos. El uso de herramientas digitales permite realizar diagnósticos más precisos y, por consecuencia, tratamientos más personalizados. Contar con un programa de gestión dental que automatice procesos y aglutine la información ayuda sin duda tener una visión centralizada de cada paciente. Otro aspecto importante de la innovación es la que se aplica a los materiales con los que se trabaja, utilizando opciones más biocompatibles y sostenibles que no solo favorecen la salud del paciente, sino también el medio ambiente.

Método de gestión, control y ahorro: a nivel de gestión clínica, la Odontología Slow también promueve un control más eficiente del tiempo y los recursos. Los profesionales pueden dedicar más atención a cada paciente, lo que mejora la satisfacción de estos y reduce el riesgo de errores o tratamientos innecesarios. Además, este enfoque favorece la sostenibilidad económica de la clínica, al optimizar el uso de materiales y de los recursos.

La Odontología Slow de Clínicas W es una nueva manera de entender la odontología, más pausada, tranquila y dedicada al bienestar y felicidad del paciente. Calidad por encima de cantidad y una gestión más eficiente ofrece no solo unos resultados excelentes, sino también la satisfacción constante de pacientes y profesionales.

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